¿Este río es muy largo?
-No mucho, tiene 75 km .
-Anda, abuelo, pues si que es largo.
Paseo con mis nietas por las riberas del río Palancia, como lo hacia cuando eran pequeñitas, al igual que mi nieto, y les encantaba echar piedrecitas a la corriente.
-¿Os acordáis?
-Vaya, abuelo, y asustábamos a los peces.
Corre una juguetona brisa que riza la superficie de los remansos, que son como espejos donde se refleja el ramaje de los chopos. El sol dibuja inquietos lunares luminosos sobre el agua mansa. Parecen barquitos en busca de aventuras.
-Chicas, en estos remansos me bañaba cuando tenía vuestra edad. Sabéis, entonces no había piscinas ni parques acuáticos como ahora.
-Qué divertido sería.
-Y a veces no calculabas bien el chapuzón y chocabas con alguna roca y salías del agua con un chichón.
-Ja,ja.ja… se ríen las dos con una risa franca, de oreja a oreja.
Me encanta pasear con mis nietos. Me siento nuevo, feliz y a veces se asoma en mí un ramalazo de niño inocente que un día fui.
Me acuerdo de esos niños que les falta cariño, que apenas sonríen, solos, tristes. Son como estrellas sin brillo. Que triste es ese mundo, Dios.
Mis nietas juegan junto a la fuente de los 50 Caños.
-Abuelo vamos a beber de todos los caños.
Y su alegría es como “una expresión de la vida”
Pienso que así es. Y las veo jugando con el agua cristalina, que mana feliz del interior de la tierra, sembrando dicha alrededor de tan mágico paraje.
Y sentado en un banco recuerdo un pensamiento de Mikhaël Aïvahov, que dice así: “También para los adultos la risa es un medio de comunicar la vida. Cuando reís, las energías que habíais acumulado en vuestro interior se desbordan y tenéis necesidad de compartir algo con los demás. Cada vez que sentís que la vida aumenta en vosotros, sentís el deseo de reencontraros con vuestros amigos, de conocer a nuevas personas, porque tenéis algo que dar: el exceso de vida que está en vosotros pide ser derramado en algún lugar, y la risa entre amigos es a menudo la manifestación de esta necesidad de comunicar la vida”.
22 comentarios:
Buenos días Luis.
¡Estos si que lo conozco!.
Hace un par de años estuvimos paseando con mi familia y mi nieta por la fuente de los 50 caños y disfrutando de la belleza del rio Palancia y comimos en un restaurante de allí.
Que conversación más hermosa.
Enhorabuena Luis y besos, Montserrat
Hola Luis
Bonito paraje, recuerdo una vez de pequeño que pase por allí, que también quise beber de todos los caños jajaja.
Un saludo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
Este río es de una belleza increíble.Me gustaría estar allí y disfrutar de vuestras excursiones.
Eres grande Luis.
Mil besos.
Bellísimas fotos, como nos tienes acostumbrados. Cómo no ¡la fuente de los 50 caños! Toda una idea relacionarla con el bueno de Omraam Mikhaël, hacía mucho que no le recordaba, todavía tengo sus obras completas. Beso.
A wonderful place and very nice pictures, i like the colors and light very much.
greetings, Joop
Los ríos siempre nos han cautivado, por su sosegada paz, por su ruidosa soledad, y por la vida que atesoran en sus márgenes y en su interior. Esta narración tan acertada nos lo ha hecho sentir de nuevo, como tantas veces...
Gracias Luis. Saludos.
Tienes toda la razón, Luis. Nada hay más bello que la risa de un niño y nada más dramático que la tristeza de un niño falto de cariño y lo más elemental.
Me queda una duda que espero me despejes. ¿Saliste alguna vez con algún chichón cuando te bañabas en el río?
Estupendo reportaje y muy emotiva entrada, abuelo orgulloso.
Un fuerte abrazo.
¡¡Que hermoso!!
No sé, si el diálogo con tus nietas o las fotos, todo es un placer de ver,me ha maravillado.
Un saludo desde Buenos Aires.
mariarosa
La risa es una de las mejores terapias amigo Luis y si son de niños todavía te sientes más feliz, un lugar precioso al igual que los recuerdos y paseos con tus nietos, el mejor remedio para los males de hoy en día, unas fotos encantadoras de este precioso lugar, da ganas sumergirse en el, un gran y fuerte abrazo para ti Luis
La fuente de los 50 Caños es un paraje muy popular. Es visitado por muchas personas los fines de semana.
Y te despejo la duda, amigo Jota. Muchas veces, porque era muy atrevido y algo despistado. No recordaba que roca me salió al paso la última vez.
Gracias, querid@s amig@s.
Abrazos,
Luis.
Me encanta ese río,
la transparencia, los reflejos, los verdes y azules...
Me encanta la fuente
de los cincuenta caños,
tus nietas, y tus palabras.
Un abrazo fuerte desde mi Librillo.
Un buen documento gráfico aderezado con el texto.
Saludos.
Se agradecen los comentarios recíprocos.
Hola Luis
Es la primera vez que visito tu blog y volveré porque me ha encantado como escribes, con qué dulzura hablas del pasado, del amor por tus nietas, por el cariño hacia la naturaleza y por la cita final sobre la necesidad de reir.
Saludos.
Cuanta belleza, josé Luís! Me parece ueq me estan dando ganas de venir a conocer todos estos parajes. si encima vas con tus nietos y les enseñas, todo cuanto sabes, seguro que tendremos saga de andadores y soñadores de cumbres.
Te felicito muy cordialmente por todo ello. Un abrazo
Hola Luis, que dulce relato con tus nietas, echando piedras a al corriente y se me antoja que contra corriente la piedra va dando saltitos.
Como lo sabes lo de la risa, que pena las personas que no saben reir, ni tan siquiera sonreir.
Un abrazo
hola amigo mio, dime no hay en Daroca una fuente de 20 caños? donde antiguamente bañaban y bebian los caballos?
como todo abuelo eres un abuelo feliz abrazo a toda la familia
Lo de los 50 caños, pensé que era solo un nombre!! pero parece que es "literal" ja ja!!
Saludos.
Y aquí en Canarias en que carecemos de ríos, me parece más largo todavía, si cabe.Por esa razón me impresionan. Se ve claro y transparente. Saludos Luis
Luis, me encantan estos relatos con tus nietas, en cierto modo las envidio por tener un abuelo como tu.....
Me alegro que la alegria de las niñas te hagan volver a ser algoniño de vez encuando, creo que es muy necesario y viene de maravilla....
Preciosos relatos.
Besos
Bonita entrada.
Una de las cosas mas bellas de este mundo es la risa de un niño,franca,sin medias tintas ni quedabienes.Yo con la de mi hija me deshago.
Un abrazo.
Hola Luis. Al leerte me viene a la mente que mis hijos no han podido disfrutar de sus abuelos y eso me apena mucho porque seguro que tanto unos como otros lo hubieran pasado genial.
Me emocionan estas entradas que realizas al pasear con tus nietas.
Bonitas fotos y bellos paisajes
Un abrazo
De niños jugábamos a ver qué piedra (plana de río) botaba más veces sobre el agua y, además, llegaba a la otra orilla: 'txipli-txapla' lo llamábamos.
P.D.: Me "pierdo" tanto en tus escritos como en tu escritura.
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