-Tomen el autobús 11, que les
dejará en la plaza de las Merindades.
Muy amablemente, el recepcionista del hotel nos informó sobre
nuestro deseado desplazamiento al centro de Pamplona.
La espaciosa calle Carlos III desemboca
directamente en la plaza del Castillo, bañada de sol. Con sus terrazas y cafés
ocupa el corazón de la antigua ciudad, famosa por los encierros de los
Sanfermines y porque es paso de
peregrinos del Camino Francés. Como se explica en los folletos turísticos,
Pamplona fue fundada por el general romano Pompeyo, sobre una aldea vascona
denominada Iruña.
A mediodía, el sol pega fuerte sobre la plaza. Así que
enfilamos la calle Chapitela, y
desembocamos en la famosa curva entre las calles Mercaderes y Estafeta.
Bueno, ya estamos en el recorrido
de los Encierros. Y seguimos paseando por la calle Estafeta, atiborrada de turistas, con sus cámaras, tomando fotos de
todo. Seguimos hacia la plaza de toros.
Hay mucha vida en esta calle.
Comercios, tiendas de recuerdos…Todo se perfuma con el sabor de los encierros.
Y también de los bares, con barras genuinas, donde el tapeo, refrescarse
y tomar una copa hacen las delicias de todos.
Nos detenemos para degustar una
tapa y un vinico en el Mesón Pirineo, uno de los bares famosos de Pamplona. Y
también visitamos la tienda Souvenirs Estafeta. Compramos un detalle representativo de las fiestas de San
Fermín, aunque es difícil la compra,
entre una cantidad enorme de artículos, a base de camisetas, cerámica, artesanía,
kilikis, encierros, patxarán, pañuelos, toricos…
-Hola, maestro.
Saludo a Hemingway, aposentado en
vistosa estatua, frente a la plaza de toros. Fue quien dio fama internacional a
los Sanfermines, con su novela “Fiesta”.
Y nos ponemos a comer en el
restaurante La Olla ,
cerca de la plaza de toros. Un menú acorde al tipismo gastronómico de Navarra.
Y que mejor, después de la
excelente comida, que dar un relajante y sosegado paseo por el frondoso parque
de la Tejera ,
viendo la arquitectura trasera de la Catedral, las murallas y el curso sinuoso del río
Arga, entronizado entre cordones de verdor, haciendo rúbricas a la historia.
Y ya enfilamos la cuesta de Santo
Domingo. Seguimos nuevamente la estela de los encierros, viendo la atractiva
fachada del ayuntamiento y desembocando otra vez en la calle Estafeta.
Pero la dejamos, siguiendo la
calle Curria, que nos eleva hasta la Catedral de Pamplona, corazón del antiguo barrio
de la Navarrería. Una
joya del gótico. La fachada actual, neoclásica, se construyó en el siglo XVIII, y el claustro
conforma uno de los elementos más importantes de todo el conjunto catedralicio.
Volvemos a seguir los pasos del
Camino, punteado por el sugerente
símbolo de la concha en las calzadas de las calles. Y visitamos, finalmente, la
iglesia de San Cernin. Una belleza. Procede de la época medieval y está
fortificada. En esta iglesia se venera la patrona de Pamplona: la Virgen del Camino.
Y seguimos nuestro paseo particular
por Pamplona. La tarde invita a pasear, a salir de compras, a ver escaparates y
a entrelazarse entre el dinamismo de esta cosmopolita capital…
-¿De donde venís?
-De Roncesvalles.
-¿Y os dirigís hasta Santiago?
-Ya veremos…
El grupo de peregrinos, gente joven, siguen su andadura por Pamplona. Como
muchos hemos hecho, se revive de esta manera tan iniciática, las antiguas sensaciones del Camino, un reto
que atrae a miles de peregrinos cada año.
Plaza del Castillo
Monumento al Encierro
Calle Estafeta
La Catedral
El Ayuntamiento
Cuesta de Santo Domingo y hornacina con la imagen de San Fermín
Murallas
Monumento a Heminway
El Camino de Santiago a su paso por Pamplona
9 comentarios:
¡Hola Luis! Tu entrada me trae buenos recuerdos peregrinos de mi paso por Pamplona.Bella ciudad para pasearla y recorrerla a pie.
Un abrazo.
Buen día Luis...
Bello paseo me has dado con tus imágenes , feliz estancia en Pamplona amigo mío la vida es bella a pesar de los pesares y viajando se conoce mundo...
Gracias `por compartir tu viaje con lindas fotos y texto.
Un abrazo de MA.
El blog de MA.
Luis, buenas fotografías y muy buena la descripción que haces de Pamplona. El viajero visita una ciudad y admira el paisaje tirístico...no sólo van a ser montañas.
Un abrazo.
Goriot.
Hola Luis
Una bonita ciudad que visité hace cinco años y sobre todo el casco antiguo me gusto mucho...
Un abrazo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
Il faisait beau, quelle chance !
Hola, ya estoy de vuelta, más tranquila tras el huracán familiar. Me has hecho recordar una antigua visita a Pamplona, aunque he de reconocer que cada vez soy más reacia a salir de mi ritmo alternante de vida. La "malas lenguas" dicen que he envejecido muy deprisa en los últimos tiempos, pero no me importa, que me quiten lo "bailao", ahora necesito más descanso. Bss.
Que viaje tan hermoso Luis...
Dios, que maravilla!
Un abrazo!
Hola Luis.
Te agradezco este paseo por Navarra a través de tus fotografías.
Que guapa la señora que está ne la fotografía.
Te mando un beso, Montserrat
Muchas gracias, Montserrat. Es mi mujer...
Un abrazo,
Luis.
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