Cada vez que visito un pueblo revivo la misma emoción que he sentido siempre. Y me afano a pasearlo, a verlo, a contemplarlo, sin que interceda el interés del pensamiento o del estudio.
Desde la ermita de Santa Bárbara la vista alcanza el colosal cabezo de la montaña señera de la Comunidad Valenciana: El Penyagolosa. Si siguiera el PRTE-31 llegaría al ermitorio de San Juan, al pie del pico. Pero hoy me quedo en Puertomingalvo. Voy a visitar este hermoso pueblo de la comarca de Gúdar-Javalambre, que es tierra de frontera y balcón del Maestrazo al Mediterráneo.
Penetro en el recinto urbano por el antiguo Portal de Umbría. Y asciendo hasta la plaza de la Iglesia, escenario de festejos taurinos, como lo señalan las barreras metálicas, ribeteado de pinceladas de sol ruboroso y grises sombras de árboles. La iglesia de la Purificación y San Blas es un monumental templo barroco del siglo XVIII. Su interior conforma la tipología “iglesia-salón”, compuesto de tres anchas naves. La torre está edificada en piedra de cantería y consta de dos cuerpos, siendo el superior de planta octogonal.
Por la calle Valladares llego al castillo. Está edificado en el punto más alto de la población, sobre un espolón rocoso. Procede del siglo XII. Es curiosa la forma octogonal de la torre del homenaje, donde aparecen varias ventanas geminadas, enfajadas de piedra sillar, extraídas de algunas de las canteras locales.
Por el callizo de la tía Sidra o del tío Jorge me asomo al Portal Alto o de San Antonio, que marca el final de la calle Alta. Es una de las torres-puertas que se conservan del conjunto amurallado de Puertomingalvo. Procede del siglo XIV. Y uno de los elementos de mayor relieve de este portal es una hornacina gótica integrada por una repisa y un dosel finamente labrados, donde figura la imagen de San Antón.
Puertomingalvo alcanzó su auge económico entre los siglos XVII y XVIII. Su rico patrimonio arquitectónico le permitió obtener la declaración de conjunto histórico-artístico en 1982. Los arcos, los revocos y pinturas de puertas y ventanas donde destellan los blancos, los pardos y azules, las inscripciones de los antiguos canteros, los portales, los aleros de madera, las puertas de las viviendas con el armónico jambaje de sillares, etc. son los elementos más primordiales de esta bella villa.
El Ayuntamiento (siglo XIV) es uno de los más importantes arquitectónicamente de Aragón. La fachada destaca por su piedra de sillería y sus hermosas ventanas geminadas, enarbolando señorialmente el estilo gótico y su traza medieval. Alberga distintas dependencias, y un gran salón con viguería de madera y pilares octogonales “donde cabe todo el pueblo”.
En mi paseo me detengo también ante el Portalico y la casa Llorens, que destaca entre las casas palaciegas de esta notable villa. Es un edificio que mantiene un artístico alero de madera tallada, el escudo nobiliario y otros detalles, como los dinteles y tiradores.
Por gentileza de la oficina de turismo visité el centro de interpretación de los castillos del Maestrazgo, instalado en las antiguas mazmorras del Ayuntamiento, y que es ejemplo de buen gusto en el montaje y visión de este legado del rico pasado medieval de estas tierras, iniciado por Alfonso II de Aragón. Dicen las crónicas, acerca de Puertomingalvo, que “durante 600 años el pueblo tuvo cuarenta y siete señores, entre obispos y arzobispos”.
En Puertomingalvo -donde llama la atención, además de la remozada arquitectura urbana de noble piedra, la limpieza de sus calles, y los balcones adornados de rojos geranios-, es fundamental detenerse en sus miradores. Situado a 1.456 m. de altitud, la visión de tierras con verdes prados y montañas es majestuosa, con sus bosques de pinos, sabinas, encinas, arces, servales..., que ornamentan de verde los paisajes y que en el otoño nos descubren los tonos más increíbles y bellos. La bucólica imagen de las masías y de las vacas, ovejas y cabras pastando por el término rubrica el atractivo de Puertomingalvo, que asegura una visita nutrida de numerosos valores patrimoniales y paisajísticos y en donde los ineludibles placeres de comer y dormir están garantizados.
Desde la ermita de Santa Bárbara la vista alcanza el colosal cabezo de la montaña señera de la Comunidad Valenciana: El Penyagolosa. Si siguiera el PRTE-31 llegaría al ermitorio de San Juan, al pie del pico. Pero hoy me quedo en Puertomingalvo. Voy a visitar este hermoso pueblo de la comarca de Gúdar-Javalambre, que es tierra de frontera y balcón del Maestrazo al Mediterráneo.
Penetro en el recinto urbano por el antiguo Portal de Umbría. Y asciendo hasta la plaza de la Iglesia, escenario de festejos taurinos, como lo señalan las barreras metálicas, ribeteado de pinceladas de sol ruboroso y grises sombras de árboles. La iglesia de la Purificación y San Blas es un monumental templo barroco del siglo XVIII. Su interior conforma la tipología “iglesia-salón”, compuesto de tres anchas naves. La torre está edificada en piedra de cantería y consta de dos cuerpos, siendo el superior de planta octogonal.
Por la calle Valladares llego al castillo. Está edificado en el punto más alto de la población, sobre un espolón rocoso. Procede del siglo XII. Es curiosa la forma octogonal de la torre del homenaje, donde aparecen varias ventanas geminadas, enfajadas de piedra sillar, extraídas de algunas de las canteras locales.
Por el callizo de la tía Sidra o del tío Jorge me asomo al Portal Alto o de San Antonio, que marca el final de la calle Alta. Es una de las torres-puertas que se conservan del conjunto amurallado de Puertomingalvo. Procede del siglo XIV. Y uno de los elementos de mayor relieve de este portal es una hornacina gótica integrada por una repisa y un dosel finamente labrados, donde figura la imagen de San Antón.
Puertomingalvo alcanzó su auge económico entre los siglos XVII y XVIII. Su rico patrimonio arquitectónico le permitió obtener la declaración de conjunto histórico-artístico en 1982. Los arcos, los revocos y pinturas de puertas y ventanas donde destellan los blancos, los pardos y azules, las inscripciones de los antiguos canteros, los portales, los aleros de madera, las puertas de las viviendas con el armónico jambaje de sillares, etc. son los elementos más primordiales de esta bella villa.
El Ayuntamiento (siglo XIV) es uno de los más importantes arquitectónicamente de Aragón. La fachada destaca por su piedra de sillería y sus hermosas ventanas geminadas, enarbolando señorialmente el estilo gótico y su traza medieval. Alberga distintas dependencias, y un gran salón con viguería de madera y pilares octogonales “donde cabe todo el pueblo”.
En mi paseo me detengo también ante el Portalico y la casa Llorens, que destaca entre las casas palaciegas de esta notable villa. Es un edificio que mantiene un artístico alero de madera tallada, el escudo nobiliario y otros detalles, como los dinteles y tiradores.
Por gentileza de la oficina de turismo visité el centro de interpretación de los castillos del Maestrazgo, instalado en las antiguas mazmorras del Ayuntamiento, y que es ejemplo de buen gusto en el montaje y visión de este legado del rico pasado medieval de estas tierras, iniciado por Alfonso II de Aragón. Dicen las crónicas, acerca de Puertomingalvo, que “durante 600 años el pueblo tuvo cuarenta y siete señores, entre obispos y arzobispos”.
En Puertomingalvo -donde llama la atención, además de la remozada arquitectura urbana de noble piedra, la limpieza de sus calles, y los balcones adornados de rojos geranios-, es fundamental detenerse en sus miradores. Situado a 1.456 m. de altitud, la visión de tierras con verdes prados y montañas es majestuosa, con sus bosques de pinos, sabinas, encinas, arces, servales..., que ornamentan de verde los paisajes y que en el otoño nos descubren los tonos más increíbles y bellos. La bucólica imagen de las masías y de las vacas, ovejas y cabras pastando por el término rubrica el atractivo de Puertomingalvo, que asegura una visita nutrida de numerosos valores patrimoniales y paisajísticos y en donde los ineludibles placeres de comer y dormir están garantizados.
26 comentarios:
Hermoso pueblo.
Así es, Logio, un bello enclave.
Saludos!
Cuantas historias guardan esas piedras apiladas, es lo que yo siempre pienso cuando paso a un pueblo asi.Otro pueblo para anotar en la guia michelin que con tanto cariño nos estás haciendo. Un beso.
Hola Luís , cuando estuve en el Màs de Borràs , yo no fuí a ese pueblo pero mi marido si , y lo que me dijo es "lo que te has perdido "...y ya lo veo aquí en tu casa , con lo que me gustan esos pueblines ,pero sabes? una buena excusa para volver allí .Un reportaje muy chulo .
Un besote y feliz fin de semana.
Un publo precioso retratado a la perfección tanto por las fotos como por el texto.
Saludos.
Hola, Veronica.
Hola, Carlota.
Hola, Alvaro.
Gracias por pasaros por esta humilde morada. Efectivamente, Veronica, lo muestro con mucho cariño. Es un pueblo muy recomendable su visita, y que me sigue impresionando cada vez que lo visito.
Que tengáis un buen fin de semana.
Abrazos.
Un lujo, como siempre, viajar de tu mano.
Nos muestras un pueblo precioso a traves de tus imégenes y texto.
Apuntado queda en la libreta de sitios pendientes de visitar
Un beso y feliz fin de semana
Hola, Begoña, me encanta compartir estas bellezas de pueblos de la provincia de Teruel, donde recorrer sus tierras es una agradable sorpresa y que siempre tengo esa sensación de vivir en una tierra maravillosa. Son pueblos que nos premian con su belleza y con su mágico silencio.
Feliz fin de semana, igualmente.
Un beso.
Hola cielo un bello texto y unas fotografias preciosas me encantaron
un beso
Encantado, Luna, tus palabras son siempre luminosas.
Un beso.
Puertomingalvo, la primera foto panorámica lo dice todo, estupendo encuadre, castillo y pueblo.
El recorrido por sus calles y su castillo muy bien reflejado en tú camara.
Como siempre, muy bien relatado.
Una abraçada.
Fantástico pueblo de aire medieval, me encanta pasear por calles como esas.
Saludos.
La foto de la cabecera nos describe, efectivamente, el encanto de este pueblo, desprendiendo evocaciones medievales.
Gracias, Pepsans.
Un abrazo.
Hola Luis!!!
Me regalas tu camara??????
hace una fostos maravillosas!!! jejejej
Las fotos del pueblo no tienen desperdicio, son geniales y muy bonita,buen seguimiento.
SAludos Luis y buen fin de semana.
Hola, Juan Carlos, es como si te trasladaras al pasado. Disfruto mucho callejeándolos. Como he disfrutado las veces que he estado en tu comarca, visitando esos prodigiosos pueblos en arquitectura popular, como La Alberca y Candelario, entre otros. Arcaicos cien por cien.
Saludos.
Merche! si es una cámara sencillica, lo que pasa es que en sitios así la señora se crece... jejeje, y me saca estas fotos.... Me sorprende mucho, la verdad. Ya la verás en septiembre.
Que tengáis un buen agosto.
Abrazos.
Gracias, amigo Pizarro, me alegro mucho que te guste. Y que tengas un buen agosto.
Un abrazo.
Hola Luis, he dado una vuelta de 400 km, para ir de Toledo a Albarracin al ver las fotos que habai publicado Mª Angeles y Jose, este pueblo llamado Puertomingalvo tendrá que esperar, pero me lo apunto bien apuntado, porque despues de ver tus fotos y leer tu texto, perderselo es un pecado mortal de necesidad.
Habrá que hablar con el que mande por esa zona para que te patrocine los viajes que con tanto cariño nos muestras, haciendo que sintamos el deseo de visitarlos, para conocerlos in situ.
Un fuerte abrazo
Abi, creo que son 400 kms. bien aprovechados. Albarracin es una pasada de pueblo, ya nos lo contarás. Y aunque sea más chiquito, Puertomingalvo es una joya medieval. Y cerca quedan Mosqueruela, Iglesuela del Cid, Cantavieja... Para visitarlos en un fin de semana.
Me encanta, ya lo ves, contar estas experiencias viajeras. Sigo con ese deseo, intrínseco en mi, desde que nacieron mis andanzas, hace ya una tira de años.
Un fuerte abrazo.
Soy Miguel, de A SALTO DE MATA, vengo por primera vez y tras hacerme seguidor, no será la última.
Que pueblo más bonito, que fotografías tan espectaculares y que descripción.
Me apunto el lugar, y me apunto a viajar y disfrutar contigo a través de tu blog.
Saludicos desde Zaragoza
Miguel
Hola, Miguel, saludicos desde mi tierra. Disfrutaremos alegremente con nuestra actividad, haciendo, como te he leido, la vida más agradable. Me gusta viajar, ser turista en mi propia tierra, y el blog es un medio ideal para anotar estas experiencias. Gracias, amigo Miguel y recibe un fuerte abrazo.
Un precioso pueblo fotografiado y descrito a la perfección.
Saludos.
Tu sigue asi, que con tigo en dos dias y medio lleno la agenda de sitios interesantes para visitar...jajajajajaja.
Un lugar precioso y unas fotos geniales.
Besos.
Muchas gracias, Ricardo, me alegro que te haya gustado.
Saludos.
Mª Angeles y Jose, que ya tengo más pueblos... jejeje. Y de Albarracin a ¡Puertomingalvo!. Más pequeño, pero una joya también.
Gracias, amigos.
Un abrazo.
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